viernes, 14 de enero de 2011

Sueño de una noche de verano I

Yo me reia y estaba tan feliz. Aun triste, me sentia alegre... al cortarle el telefono sabia que me arrepentiria, pero ya lo veria. Me encaminaba hacia el filo del precipicio; una muerte silenciosa, de la cual no podia escapar y que sin embargo provocaba cierto placer... no era tan malo... nadie iba a morir y lo mas importante de todo: ya lo veria. Palabras de consuelo... mi cara configuro una mueca tan pronto como deje de escuchar su risa en mi cabeza. Y todo estuvo en silencio.
De pie. Hacia mi habitacion, dictaban mis planes, no es cierto? Pero algo me detuvo y me encamine hacia el sillon. Ese sillon... reciente punto de encuentro, aun con las marcas que dejaron el peso de nuestros cuerpos, "ese delirio" pense. De pie ante el, no me atrevi a sentarme. Hice el ademan de arrodillarme y absorber todo lo que podia haber dejado tras el... oli y aspire cada una de las moleculas de aire y suspire al caer en la cuenta de que ya no quedaba nada. No quedaba nada de el, nada tangible, nada que me hiciese recordarlo y a la vez sentir una gran satisfaccion ligada a ese dolor enorme que suponia separarme de el, aunque solo fuese una semana. Toda la tristeza que habia intentado mantener a raya a lo largo de los ultimos quince años salio a flote... y me hundi, bajo ella. Aplastante, no? Sentir aquella debilidad, el talon de aquiles de la mas fuerte, de la que jamas se enoja ni reclama por nada... y darme cuenta de que la debilidad en mi recae en el simple hecho de separarme de el. El, el, el, cuantas veces habia pensado en aquello? El. El era importante, el era mi vida. Amor, el delirio de una adolescente? No lo sabia, no podia saberlo en ese momento, ahi, inclinada sobre los cojines que alguna vez habian sostenido su cabeza... y la mia.
Me incorpore. Feliz. De alguna u otra forma yo era feliz. Asi, como la criatura que soy, felicidad abrumante, proveniente de ese abismo del que no podia salir y que no obstante no se parecia a nada a ningun abismo sobre los cuales habia leido anteriormente; en lo absoluto. Abismo... no culpa. No me sentia culpable y lo peor de todo es que no me importaba nada. Yo era feliz respirando, viviendo, en ese estado, feliz, en esa catatonia tan tan activa, feliz, enamorada, feliz, enamorada. Enamorada.
Porque yo estaba enamorada... el amor es increible, es extraño, ni siquiera se lo que es y cuanto dura. Pero este es el presente, Este es el presente? Si, este es el presente. Y en este presente yo estoy enamorada. Tanto que me canso, me canso, mi corazon se cansa de latir tan rapido, se cansa de sentir aquel influjo de sangre intenso que se produce en cada situacion vergonzosa, que hace enrojecer mis mejillas. "Me voy a morir de un infarto" me pregunte con sarcasmo. Y es ahi donde me doy cuenta de la fina y delgada linea que separa ambos amores, los tipos de amor que siento, que se ciernen sobre nosotros delicadamente, de una manera rosa. Estoy enamorada y lo quiero. Y lo quiero... y soy una sinverguenza solo porque lo quiero.
Y mi cariño es el mejor escudo para lo que venga.
Vuelvo a mi libro en silencio, me embarga el sueño, es hora de dormir :)

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